Sentimos que vamos a salir de un momento a otro, y que ese será nuestro gran primer momento, mientras tanto pre-existimos. Se trata de nuestro primer pre-sentimiento, y demoramos salir porque intuimos que se está mejor ahí dentro, que fuera hay demasiada luz, se oyen gritos y carreras, hay prisa y nos hemos acostumbrado al mundo interior de las sombras, y el adn nos dice que una vez fuera ya no hay vuelta atrás.
Después nos rodearán otras sombras, que nos seguirán sin descanso, y nos acostumbraremos tanto que las buscaremos aunque no las necesitemos, pero entonces en ese mundo todo será maldad y padresnuestros, discursos sin final, públicos homogéneos y mucha ética existencial, se acabará la lentitud y todo se cubrirá de una brisa invisible de virtud. Por eso y más no queremos salir. Tiran de nosotros pero nos agarramos a la cálida obscuridad del interior, ya pre-sentimos nuestro final en una ciudad abierta y multicultural, inútil sutilidad, y nos repetirán para convencernos que la Ciencia es complementaria de la Espiritualidad.
El Sol entra por grandes ventanales ahí fuera, sí, pero quién quiso nacer.
Después nos rodearán otras sombras, que nos seguirán sin descanso, y nos acostumbraremos tanto que las buscaremos aunque no las necesitemos, pero entonces en ese mundo todo será maldad y padresnuestros, discursos sin final, públicos homogéneos y mucha ética existencial, se acabará la lentitud y todo se cubrirá de una brisa invisible de virtud. Por eso y más no queremos salir. Tiran de nosotros pero nos agarramos a la cálida obscuridad del interior, ya pre-sentimos nuestro final en una ciudad abierta y multicultural, inútil sutilidad, y nos repetirán para convencernos que la Ciencia es complementaria de la Espiritualidad.
El Sol entra por grandes ventanales ahí fuera, sí, pero quién quiso nacer.
Que final tan de humor negro, poético, y certero. También me llamó mucho la atención que te refieras a "una brisa invisible de virtud", en lugar de al usual vicio, ¿Atrapaste que nos empiezan a joder desde la virtud, que es ella la que en verdad nos conduce a probar el vicio?
ResponderEliminarUna pieza excelente.
Saludos!
Olé Lobo Lejano por tu comentario! así se habla. Humor negor, poético y tirando a la diana para ver si le damos...
ResponderEliminarUn abrazo virtual Lobo Lejano!
Ayy Madre mía!! problemas existenciales? a estas altura José María?
ResponderEliminarNadie pidió nacer ni hacerlo donde lo hizo, es una lotería donde entran todos los números y en ese "juego" todos tenemos un número asignado de antemano y te aseguro que toca siempre.
Con el número en la mano nos ponen a la calle y ahí te espabiles como puedas y baila al son que toca (otros) y si no sabes bailar, aprende e intenta que no te pisen los pies, esquiva tantos pisotones como puedas.
Cuando la música pare, solo entonces (puede) descansarás.
Bueno, eso me han sugerido tus palabras, pero igual me he subido a los cerros de Ubeda y he vuelto a bajar jajaja no sé ee
Ten una hermosa tarde querido amigo, besitos azules muassssssss